Mes del Orgullo | Esta soy yo, Brenda
Última actualizaciónJunio es el Mes del Orgullo, un mes dedicado a reconocer a la comunidad 2SLGBTQIA+, su historia, logros y su continua lucha por la igualdad.
Este año, hablamos con Brenda Viquez (ella), una Especialista en Riesgos e integrante de nuestra Red de Inclusión de Empleados TC Pride (EIN) en nuestra oficina de Ciudad de México. Como miembro de la comunidad 2SLGBTQIA+, compartió su historia con nosotros.
Conoce a Brenda
Mi nombre es Brenda, y he sido parte de TC por más de dos años como Especialista en Riesgos con base en nuestra oficina de Ciudad de México. Fuera del trabajo, disfruto pasar mis ratos libres con mi pareja con quien ya tengo bastante tiempo, Judith. Nos encanta crear nuevos platos en la cocina o relajarnos con una película, ya sea en casa o en los cines. Aunque me encantan las películas de terror y suspenso, siempre estoy feliz de ver un drama con ella también (¡el género favorito de Judith!).
Brenda y su pareja, Judith.
Más allá de mi amor por las películas de miedo y la cocina, la música ha sido una parte profunda de mi educación y una forma de conectar con mis raíces. Crecí en una familia de músicos: mi hermano menor, mi papá, tíos y abuelos todos tocaban instrumentos. De hecho, mi papá, hermano y yo incluso tenemos nuestra propia banda. Mi papá toca la trompeta, mi hermano toca el bajo y mi especialidad es el piano. Todavía estoy tratando de convencer a Judith para que aprenda a tocar el saxofón y se una a nosotros. Juntos, nuestra banda toca salsa, cumbia y de vez en cuando una pieza de jazz. Aprecio todo tipo de música, pero algunos de mis artistas favoritos son músicos pop como Katy Perry, Lady Gaga y Beyoncé. La música me permite expresarme y conectarme con mi familia.
Enfrentando desafíos
Mi historia no es una sin desafíos. Mi familia tiene un trasfondo religioso, donde los valores y expectativas tradicionales moldearon gran parte de nuestra vida. La idea de ser honesta con mi familia sobre mi verdadero yo era aterradora. Temía el rechazo, la decepción y perder el profundo vínculo que tenía con ellos. Recuerdo vívidamente la primera vez que intenté hablar con mi madre sobre mi orientación. Su reacción inicial fue de confusión y resistencia. Ella luchaba por reconciliar sus creencias con la realidad de tener una hija que no encajaba en el molde que había imaginado. Dolió, pero también entendí que el cambio lleva tiempo.
Sabía que no podía esconder quién era para siempre. Con el tiempo, mi madre comenzó a abrir su corazón y ampliar sus horizontes. Empezó a tener conversaciones con otros miembros de la comunidad 2SLGBTQIA+ que venían de familias que no aceptaban su orientación. Estas discusiones le dieron nuevas perspectivas y la ayudaron a procesar sus sentimientos de una manera que se sentía menos solitaria. Poco a poco, sus puntos de vista comenzaron a cambiar. Se dio cuenta de que mi relación con Judith, mi pareja desde hace ocho años, no era diferente de cualquier otra relación amorosa. Estaba construida sobre la confianza, la compasión, el respeto y un profundo sentido de cuidado mutuo.
A medida que la comprensión de mi madre crecía, las cosas comenzaron a ser más fáciles. Ha sido un viaje, pero ver su crecimiento ha sido una de las partes más gratificantes de mi vida.
A lo largo de todo, he tenido la suerte de tener amigos que me aceptan exactamente como soy. Desde el principio, mis amigos han sido de mente abierta, solidarios y amorosos. Nunca me cuestionaron ni me juzgaron, y han sido mi roca a lo largo de este viaje. Saber que tengo un círculo de personas que me abrazan completamente ha sido una fuente de fortaleza y alegría.
Brenda con sus amigas.
¿Sabías qué?
La bandera arcoíris se convirtió en el símbolo del orgullo 2SLGBTQIA+ en 1978, creada por el artista y activista Gilbert Baker. Encargado por Harvey Milk, uno de los primeros funcionarios electos abiertamente gay en EE.UU., para crear un símbolo para la comunidad 2SLGBTQIA+, Baker imaginó una bandera que representara diversidad, unidad y esperanza.
Aceptando el Orgullo
El Mes del Orgullo tiene un lugar especial en mi corazón. Es una declaración que dice que estamos aquí, y estamos orgullosos de quienes somos. Participar en las marchas y eventos rejuvenece mi espíritu, destacando el progreso que hemos hecho y el camino que aún queda por recorrer. Soy parte activa de la TC Pride EIN, y estoy orgullosa de trabajar para una empresa que acepta de todo corazón a mi comunidad.
Para aquellos en la comunidad 2SLGBTQIA+ que todavía están encontrando su camino, mi mensaje es simple: no dejes que el miedo te detenga. Abraza tu verdadero yo, porque el cambio significativo en el mundo comienza con nosotros. Rodéate de aliados, ellos te darán la fuerza y el coraje para expresar tu autenticidad. Espero que, al compartir mi historia, inspire a otros a abrazar su verdad.