Facilitando acceso a agua potable para las comunidades rarámuris en Chihuahua

El acceso al agua potable es un Derecho Humano que muchos de nosotros damos por sentado, sin embargo, ese no es el caso para algunas de las comunidades indígenas en el norte de México.

Proveer agua potable a algunas de las comunidades en la región de la sierra de Chihuahua ha sido un reto que se ha enfrentado desde hace varias décadas. Las temperaturas extremas – que pueden alcanzar hasta los 40°C en verano – y las condiciones desérticas de la zona, causan severas sequías cada año. Estas condiciones se agudizan por la falta de infraestructura para proveer agua a las comunidades pequeñas afectadas.

Los Tarahumaras, o Rarámuris como también se les conoce, es una de las comunidades indígenas que más ha padecido de la falta de agua potable, pues la mayoría de las veces dependen del agua que recolectan de la lluvia, de no ser así, los habitantes tienen que recorrer casi 15 kilómetros por terrenos poco accesibles para poder obtener este recurso vital.

Es precisamente en la Sierra Tarahumara por donde cruzan varias secciones del gasoducto El Encino – Topolobampo y tiene un impacto e influencia directa en estas comunidades afectadas por la escasez del vital líquido.

Haciendo frente a la escasez

Comprometidos con el desarrollo de comunidades sólidas y fuertes en donde vivimos, trabajamos y operamos, TC Energía y el Gobierno de Chihuahua firmaron un acuerdo en 2018 para desarrollar un programa para la construcción de 1,830 sistemas de cosechas de agua y 35 sistemas de recolección comunitarios, con una inversión total por $58.1 millones de pesos. Este programa beneficiará alrededor de 2,450 familias rarámuris y a 9,000 personas que actualmente no tienen acceso a agua potable

La fase de implementación comenzó en 2019 cuando Organizaciones de la Sociedad Civil comenzaron a proveer toda la ayuda técnica y los entrenamientos necesarios a las comunidades rarámuris para instalar los sistemas de agua. Estas organizaciones han trabajado en las comunidades por varios años y han desarrollado sus propios modelos de involucramiento con las comunidades indígenas, respetando su ideología, cultura y tradiciones.

“Al desarrollar iniciativas conjuntas como estas con el Gobierno de Chihuahua, TC Energía refuerza la forma en la que construimos relaciones sólidas con grupos de interés locales, mientras también mantenemos los valores de la compañía y los estándares de responsabilidad corporativa como parte medular del proyecto,” mencionó Carlos Borunda, Director de Relaciones Gubernamentales y Atención a Grupos de Interés de TC Energía.

Al finalizar el programa, las familias rarámuris no sólo tendrán acceso a agua potable, sino que también mejorarán su calidad de vida considerablemente, pues se espera que este programa contribuya a disminuir el número de enfermedades causadas por el consumo de agua contaminada.

“Agradecemos a TC Energía por la inversión social que hizo por el gasoducto Topolobampo que es tan importante para nuestro Estado. Estamos implementando un proyecto integral para la recuperación de nuestras comunidades indígenas, que es nuestra prioridad en la Sierra de Chihuahua,” mencionó Javier Corral, Gobernador de Chihuahua.